Hoy murió un amor.
No hay nada de qué hablar.
No me quiere hablar.
Y francamente, yo tampoco.
No me inquieta ese silencio. Seguir leyendo «Corazón aliviado»
Baluarte literario y cultural
Etiqueta: Corazón
Hoy murió un amor.
No hay nada de qué hablar.
No me quiere hablar.
Y francamente, yo tampoco.
No me inquieta ese silencio. Seguir leyendo «Corazón aliviado»
No es prosa, tampoco es poesía.
Ni se trata de una vieja historia.
Son membretes que me pueblan la memoria
y que buscan su lugar todavía.
Un corazón se despliega,
un sentimiento se expande,
una mirada que ruega
que ya nadie más le demande.
Palabras voladas al viento,
andares llevados al tiento.
Mensaje de señas vibrante
cual luna de cuarto menguante.
No se traduce en palabras,
no se interpreta en centellas.
Alcanza un abracadabra.
Es simplemente… ella.
Ella, elle l’a por la exquisita cantante francesa France Gall (1987). Un tema que en aquel entonces inspiraba a este entonces joven soñador que iba a la búsqueda de… ella.
Ya publicado en Letras & Poesía el mes pasado.
En todos los grupos de amigos de barrio hay uno de pocas pulgas. Que dice las cosas así nomás, como le vienen, sin vueltas. Que no le importa nada hacerse odiar cuando lo que dice suena feo o es desagradable. Porque sabe que es así como lo dice. Si además de eso es feo de cara, poco elegante, se está empezando a quedar pelado antes de los dieciocho, su vida amorosa es una desgracia, entonces estás empezando a conocer a Tristán. Para que no tenga tanto eco de «tristón», los amigos le dicen Tris.
En la entrega pasada te mostré al personaje más triste, al que todo le falta. Tris es distinto en ese sentido, él sí tiene padre y madre, vive en una casa decorosa, además de dormitorio tiene su propio cuarto para escribir y leer en el sótano de la casa. Tiene una veta de escritor en ciernes, lleva un diario desde que era muy chico, escribe observaciones muy lapidarias.
Y es flor de amigo. De los mejores. Honesto, derecho, incapaz de hacerle una maldad a alguien que quiera. Después, si no te lo aguantás porque te gruñe, es problema tuyo. Porque él es así como lo ves y lo sentís. No le importa que le llamen «el amargo».
¿Querés conocer al más popular de todos? Para la próxima te lo cuento.